jueves, 1 de marzo de 2012

martes, 28 de febrero de 2012

Fuck you!


Con el coraje aprendí a no cayarme y dejar de darle importancia a las opiniones de los demás. 
Con la fuerza aprendí a levantarme 1000 veces aunque haya caído 100. 
Con la fé aprendí a creer en que lo improbable sucederá. 
Con la esperanza aprendí a seguir mis sueños y luchar por lo que quiero. 
Con el amor aprendí a dar y recibir. 
Con el optimismo aprendí que todos los problemas tienen solución.
Con la libertad aprendí a expresarme sin límites.
Con la verdad aprendí que la mentira tarde o temprano te lastima.
Con la perseverancia aprendí a alcanzar mis metas y objetivos.
Con la bondad aprendí a ser mejor persona con todo aquel que me rodea.
Con el perdón aprendí que el entorno se llena de paz y alegría.
Con vos aprendí que el coraje, la fuerza, la fé, la esperanza, el amor, la libertad, la verdad, la perseverancia, la bondad y el perdón son solo palabras que se las lleva el viento... palabras en las que solo idiotas creen.

lunes, 27 de febrero de 2012

Quisiera

Quisiera volar más alto que un jilguero.  Quisiera tener ese encantador asento español.Quisiera llegar a la luna y volver en 1 día. Quisiera recorrer el mundo en 2. Quisiera que todo el año sea verano. Quisiera que nieve a la misma vez. Quisiera desayunar los 365 días del año en la cama. Quisiera tener una fábrica de golosinas. Quisiera teñirme el pelo con los colores del arcoiris. Quisiera caminar sobre el agua. Quisiera escalar la Cordillera de los Andes. Quisiera nadar con cocodrilos. Quisiera viajar a Brasil con apenas unos centavos. Quisiera revivir a John Lennon. Quisiera tirarme de un paracaídas desde el Burj Dubai. Quisiera volver el tiempo a los 80s. Pero más que nada en el mundo quisiera besar tus labios, oler tu perfume, que crucemos miradas, sentir tu piel rozando a la mía.

viernes, 24 de febrero de 2012

Rodeada de gente

Cada vez más sola. Cada vez más triste. Reconozco no ser la misma, pero no encuentro un porque certero. No, no soy de las que tienen chicos atrás, de las que llaman la atención cuando pasan, no tengo muchísimos amigos, no me desenvuelvo fácilmente. Me cuesta. Me duele. Me lastimo. Pero no puedo cambiar. Soy así aunque no me guste y ya no quiero seguir fingiendo que todo está bien, algo tengo que hacer conmigo...
no puedo, no puedo, no puedo.

Capuchino

Definitivamente todo tiene un principio y un final. De vez en cuando me pongo a pensar que hago acá, cual es mi propósito en esta vida. Es irónico... nos preparamos para morir.
Esta vez le tocó a mi perro, Capuchino, que llegó a casa recién nacido, cuando yo tenía cinco años. Al principio era como un nuevo hermanito para mi y mis hermanos. Pero a medida que crecíamos, se hacía un estorbo, un gasto más para mis padres... "no teníamos tiempo para el". Ahí decidimos... vá, decidieron  llevarlo a la casa de mis abuelos, que por lo menos iba a tener más companía y cariño que el que nosotros podíamos darle. Los años pasaban, y aunque mis abuelos le brindaron amor, se iba volviendo cada vez más gruñon, le ladraba a cualquier extraño, ya no corría a embarrarse una vez que lo terminaban de bañar, ya no movía la cola como lo hacía antes. Lo que siempre me voy a acordar es como, hasta último momento, iba corriendo a la cerca cuando escuchaba que llegábamos a la casa. Mis hermanos y papás lo pasaban de largo, pero yo lo primero que hacía era ir a verlo, hacerle mimos y hablarle.
Así pasaban los años y se iba poniendo más viejo... creo que más rápido de lo que debía. Me acuerdo de su mirada la última vez que lo ví, antes de que le dieran esas inyecciones, estaba realmente mal. Ya ni se paraba, los gusanos lo comían tanto por dentro como por fuera pero el nunca lloró. Lo abrase, aguantándome las ganas de llorar, adivinando lo que vendría después.
No se como explicar lo que me sucedió cuando volvía de vacaciones... tuve el presentimiento de que a la vuelta Capuchino ya no iba a estar más con nosotros. Y así fue. Poco a poco fue cerrando los ojos, tranquilo, para irse a un lugar mucho mejor, sin tristezas, dolores, ni soledad.
Me arrepiento de no haberlo disfrutado mientras pude. Es así...uno no valora lo que tiene hasta que lo pierde, y hoy puedo decir que a este perro yo lo QUIERO y siempre lo voy a hacer.

lunes, 9 de enero de 2012

Mariposas en el estómago

Nunca había visto tantas estrellas en el cielo, pero no les dí importancia, porque lo que tenía enfrente mío era mil veces mejor que eso. El pensaba que lo escuchaba mientras me contaba anda a saber cual de  sus anécdotas, que por cierto, ya las conocía de memoria. No podía desaprovechar el momento. Su mirada me tenía hipnotizada, su sonrisa perfecta me enamoraba cada vez más. Dejó de hablar, nuestras miradas se cruzaron, las olas ya no hacían más ruido, poco a poco se acercó a mí. En el preciso instante en que me besó, sentí un cosquilleo en la panza inexplicable. Sonó "Here comes the sun". Era la alarma del reloj. He odiado esa alarma cada vez que me despertaba a las seis de la mañana para ir a la escuela, pero jamás la odié tanto como aquella vez. Demasiado perfecto para ser real.

jueves, 5 de enero de 2012

Chechu

Su tono sarcástico tan difícil de entender, palabras sabias por tanto leer. No le digas tuco, mucho menos porción. Nada la caracteriza más que sus rizos (no precisamente de oro) los cuales por tantos nervios no deja de enroscar entre los dedos. Tanta cultura musical que jamás confundiría Backstreet Boys con Bon Jovi. Puede ver el Everest  desde Walt Disney World. Compañera de largas caminatas y viajes hacia el centro. Solo fueron tres años, pero parecen dieciséis. Una palabra inventada, más de quinientas carcajadas. En Argentina hace falta más gente como ella, pero eso es imposible de encontrar. A pesar de la frontera que nos separa siempre va a estar en mi corazón y su risa ronca en mi memoria.

martes, 11 de octubre de 2011

Qué es el amor?


Cuando me preguntan cuál es la clase de chico ideal para mi, se me viene la imagen del típico hombre de las películas románticas. El que le escribe 365 cartas para los 365 días del año, el que nombra una estrella con su nombre, el que bebe el veneno al creerla muerta, el que arriesga su vida y la de su familia con tal de que no le hagan daño, el que no para hasta sacarla de aquel barco con vida, el que se mete en el cuerpo de una mujer luego de su muerte para volverla a tocar y el que esquiva las diferencias de las clases sociales por el amor que siente por ella, dejando a un lado los prejuicios.
Y ahí es donde vienen las risas. Seguidas de un “eso no existe en la vida real”, “madurá”. Y si el chico de las películas en verdad existe? Déjenme soñar, déjenme ser, déjenme desear, déjenme CREER. Creer que lo voy a encontrar tal como lo esperaba, que luego me voy a equivocar, y que voy a llorar día y noche extrañando lo que alguna vez sentí que el era. Pero por lo menos lo voy a intentar.

sábado, 27 de agosto de 2011

Music


Lo que me da ganas de seguir cuando ya no queda nada y mi alma está triste. Con tan solo escuchar una canción cae una lágrima de dolor al encontrarte solo, otra de emoción al recordar y otra de desesperación al no saber que hacer. Es el empujón para seguir, seguir y seguir, una compañía fiel e incondicional. Cada melodía, cada acorde, cada nota, cada sonido, cada ritmo llega a mi ser. Con ella todo se transforma, todo se vuelve hermoso, los problemas desaparecen, la calma predomina en el ambiente, ya nada importa alrededor. Vos, tu mundo y la buena música.


Como no podía ser de otra forma, The Beatles. Para mí, una de las mejores bandas de la historia. Inspiran con cada canción, y aunque traten de imitarlos jamás van a igualarlos, simplemente UNICOS.